Entrevista a Carlos Llano Cifuentes por Alma López y publicada en EL FINANCIERO el 26 de julio de 2004.
En su libro Humildad y Liderazgo, el consejero de Grupo Posadas y fundador de la revista ISTMO señala que en lugar de que el trabajo se piense en términos de equipo, en muchas organizaciones y gobiernos los líderes cuidan la posición y esto resulta no funcional, porque no buscan el objetivo institucional del grupo que dirigen, sino la acentuación de su propia persona.
El liderazgo funcional requiere de personas que no desean sobresalir, sino estar en ayuda con aquellas personas con quienes trabajan.
En entrevista con EL FINANCIERO, el rector fundador de la Universidad Panamericana subraya que en México prevalecen los líderes que se preocupan más por su postura dentro de la organización que de los logros que deben aportar a la sociedad en que trabajan.
-¿Cuáles son las cualidades que procuran más los líderes mexicanos?
-En una encuesta realizada por el IPADE entre mil 155 personas, para sorpresa nuestra, la modestia, que es una cualidad humana de la humildad, alcanzó la penúltima posición de 24 que consideramos útiles para el líder. Las primeras posiciones las ocuparon: fertilidad en recursos, imaginativo, rápido de pensamiento, responsable y justo.
Ahora se da poca importancia a una condición que antes era decisiva.
-¿Por qué un líder debe ser humilde?
-Se debe trabajar como compañero de los demás, no encima de los otros para demostrar su supremacía. Sostengo en el tema del liderazgo que la nota sustancial de la misma es el compañerismo. El líder es el buen compañero, buscando la igualdad con sus colaboradores.
-¿Qué diferencias hay entre los líderes mexicanos y estadounidenses? ¿Quiénes son más humildes?
-En Estados Unidos tienen bipolaridad. Por un lado, personas con gran apetencia de ser famosas, pero también están quienes tienen gran capacidad, y en las dos cosas nos ganan. El que quiere ser famoso logra hacerlo mejor que quienes quieren ser famosos en México, por razones obvias. Pero, la persona que pretende erigir un equipo de trabajo en Estados Unidos lo logra mejor que en México.
-¿Por qué?
-En Estados Unidos, desde el principio, el trabajo es pensado en términos de equipo. Esto ha tenido una pequeña grieta, porque hay escuelas de negocios de ese país que, en lugar de subrayar en los empresarios la importancia de la solidaridad y del trabajo en equipo, han destacado la competencia. Generar competencia dentro y fuera de la empresa, en último término, lo que hace es romper los objetivos comunes del equipo de trabajo. Unos tratan de ser más que los otros en lugar de llegar juntos a la meta.
-¿Cómo se puede ser un líder de éxito sin perder la humildad?
-No se puede tener éxito si no se es humilde y se logra conjugar ambas cualidades haciendo ver tanto a la organización como a la sociedad que los resultados no dependen de él, sino de sus colaboradores. El liderazgo no es cualidad de una persona individual, sino de un conjunto de personas que persiguen una meta. El líder no es el Hitler que aparece en fotografías, sino el equipo.
-El fundador de Wal-Mart, Samuel Walton, fue un claro ejemplo del líder humilde; no destacó nunca como persona pública ni notoria. Vivió sin pretensiones y se le conoce porque creó la empresa de mayor éxito en el mundo en un sector tan complicado como la venta al menudeo. Sólo una vez viajó en primera clase; vestía modestamente; su automóvil no tenía aire acondicionado en una ciudad donde la temperatura llega a 47 grados en verano y vestía modestamente con su sueldo de ejecutivo.
-¿Hay empresas en México que hayan logrado esta combinación?
-Puedo dar ejemplos: Grupo Bimbo, Grupo Modelo y Cydsa. Pablo Diez, fundador de Modelo, es otros claro ejemplo de líder humilde que no hacía grandes fiestas, ni apareció como figura pública, su estilo era austero.
-Multinacionales como Wal Mart, Nestlé o Unilever, son claros ejemplos de empresas que, apoyadas en su éxito, arrasan a sus competidores. ¿Esto no va contra la humildad?
-No es que estas multinacionales arrasen a las mexicanas, sino que el trabajar en equipo y ser eficaces superan a la competencia manteniendo un alto sentido de colaboración. Sin embargo, no es la competencia entre las empresas la que provoca su éxito, sino su compromiso de servir mejor a la sociedad.
-¿Cuál es su percepción de los líderes y las empresas que se han visto envueltas en escándalos financieros?
Diría que hay empresas que destacando en su ramo quieren ser más grandes, metiéndose en terrenos para los cuales no tienen conocimiento ni capacidad. Lo único que pretenden es aumentar el tamaño. En otros escándalos se trata de empresas que quieren quedar bien a toda costa y que desean presentar resultados eficientes y para eso se ven obligados a camuflar los resultados, no con objeto de mantener las acciones en determinado valor; la intención es no perder el prestigio que habían adquirido de buenas empresas.
