El papel del Dr. Carlos Llano en la formación de instituciones

Fue un intelectual preocupado por la formación y perfeccionamiento de quienes tenían la responsabilidad de dirigir empresas. Promovió la fundación del Instituto Panamericanno de Alta Dirección de Empresa, IPADE, en México.

Al terminar sus estudios en Roma, Carlos Llano regresó a México para trabajar en los negocios de su familia. Ingresó a la fábrica de chocolates La Suiza ocupando el puesto de jefe de compras, después se desempeñó en la gerencia, hasta convertirse en director general. 

 

ALGUNOS DATOS EN BREVE:

  • 1958: funda la revista ISTMO consagrándola a la difusión del pensamiento humanístico, social y económico.
  • 1967: Junto con empresarios destacados del país, funda el Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE), primera escuela de negocios de México.
  • 1985-1994: Primer rector de la Universidad Panamericana, (UP) donde también impartió la cátedra de Teoría del conocimiento durante cuarenta años. Presidente de su Consejo Superior de 1967 a 1994.
  • 1968: Presidente fundador de ICAMI, centro de formación y perfeccionamiento directivo para mandos medios.
  • Adicionalmente, durante su trayectoria profesional también ocupó diversos cargos directivos y fue consejero en diversas empresas e instituciones, entre otras: miembro del Consejo de Grupo Posadas de México, consejero de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal en México, miembro fundador del Instituto Mexicano de Doctrinal Social Cristiana (IMDOSOC), Miembro Honorario de la Unión Social de Empresarios de México (USEM), y Presidente de la Fundación Montepío Luz Saviñón.

 

REVISTA ISTMO

En 1959 fundó ISTMO, una revista que presenta pensamiento e ideas  a lectores con inquietud cultural. Llano fue director de la revista hasta 1984 y a partir de entonces se convirtió en miembro del consejo editorial, siempre apoyándola con ideas y con sus valiosos artículos. La revista es una de las publicaciones vivas más antiguas de México.

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INSTITUTO DE ALTA DIRECCIÓN DE EMPRESA, IPADE

Preocupado por la formación y perfeccionamiento de quienes tenían la responsabilidad de dirigir empresas en México, en 1966 asumió el liderazgo de un grupo de importantes empresarios, entre los que se encontraban, Manuel Senderos, Gastón Azcárraga Tamayo,  Carlos Gutiérrez Nieto y el Ingeniero Eneko Belausteguigotia, y promovió la fundación del Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE). Llano fue su primer director general y posteriormente presidente de su consejo superior.

Pero, ¿cuáles fueron las razones para fundar una escuela para empresarios? Don Manuel Senderos Irigoyen, uno de los empresarios que se comprometieron y ayudaron fuertemente con dicho proyecto educativo, dijo, durante la ceremonia en que la Universidad Panamericana le concedió el doctorado Honoris Causa que El empresario produce riqueza y genera empleo. Gracias a su arrojo, permite a la población el acceso a ingresos necesarios para el sostén de familias, y le da la oportunidad de una ocupación digna. Si no existen empresarios capaces, no se producen empleos y, sin ellos, se corre el riesgo de una crisis social y económica amenazadora del bienestar de cualquier país. En México, la comunidad de empresarios era relativamente joven, pues se empezó a formar a principios de 1920. Antes de finalizar la Revolución Mexicana, casi todo el aparato productivo estaba en manos de extranjeros, a saber: la minería, el petróleo, la industria eléctrica, la banca, los seguros e incluso el comercio... (se) dio origen a la formación de un nuevo grupo de hombres y mujeres de negocios, comprometidos con el futuro del país, los cuales también se preocuparon por abrir brecha y crear condiciones más favorables para las nuevas generaciones de emprendedores. (Esos) primeros hombres de negocios eran personas sin preparación técnica,… Podría decirse que tenían más entusiasmo que técnica para conducirse en sus negocios. Sin embargo, poseían el gran merito de proporcionar los elementos para el desarrollo del país. De no ser por ellos, la situación de México hubiera sido simple y sencillamente insostenible. La razón principal por la que se constituyo el IPADE fue dotar de conocimientos y habilidades a este grupo grande de empresarios que necesitaban aprender sobre la marcha y tenían, muchas veces, que improvisar. Sabíamos que, en la medida en que se lograra dotar a ese grupo de nuevas habilidades, valores éticos y cívicos, la contribución al país de este grupo que emergía con fuerza sería, a su vez, sumamente valiosa.

Hasta 2010, más de 28,000 personas han participado en los diversos programas que ofrece el IPADE en sus sedes permanentes en la ciudad de México, Monterrey y Guadalajara y en catorce ciudades más del país. Se trata de participantes provenientes, principalmente de México (y de otros países) quienes, en su mayoría, buscan hacer la diferencia en el mundo de la empresa, con la formación ética y humanista que Carlos Llano inspiró.

 

 

CENTRO DE FORMACIÓN Y PERFECCIONAMIENTO DIRECTIVO, ICAMI

En 1968, ya siendo director general del IPADE, ayudó a la creación del Centro de Formación y Perfeccionamiento Directivo, ICAMI, institución dedicada a la formación y desarrollo de gerentes, que da a sus participantes la oportunidad de vivir su trabajo profesional como un medio de desarrollo. A la fecha, el ICAMI ha atendido a más de siete mil empresas y han pasado por sus aulas más de 105,000 participantes.

 

UNIVERSIDAD PANAMERICANA

En el caso de la Universidad Panamericana, Carlos Llano encabezó al grupo que fundó el Instituto Panamericano de Humanidades (IPH) en 1968, con la misión de ofrecer una formación humanística integral. Inicialmente, impartieron cursos de pedagogía, filosofía y derecho. Tiempo después, en 1978, se decidió impartir ocho licenciaturas adicionales. Fue cuando el IPH se convirtió en la Universidad Panamericana, que  actualmente cuenta con campus en la Ciudad de México, Guadalajara y Aguascalientes, en los que ofrece 33 licenciaturas y diversos estudios de posgrado. Más de catorce mil personas han egresado de esta Universidad, de la que Carlos Llano fue rector, presidente de consejo y, desde sus inicios y hasta una semana antes de su muerte, profesor de la asignatura teoría del conocimiento en la licenciatura de filosofía.

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MIEMBRO DE CONSEJOS

Además de los reconocimientos, Carlos fue parte de diversos consejos y asociaciones en el país y en el extranjero, por ejemplo, ha sido miembro emérito de la Unión Social de Empresarios de México (USEM), miembro de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), miembro correspondiente de la Academis Brasileira de Filosofía, socio académico de la Academia Internacional del Direito de Economía del Brasil, presidente del consejo de Montepìo Luz Saviñón IAP, asociado de la Fundación México en Harvard A.C., miembro del consejo de administración de Grupo Posadas y miembro del consejo de la Fundación Mexicana para la Calidad Total. 

En 1983 participó en la fundación del Instituto Mexicano de la Doctrina Social Cristiana (IMDOSOC), organización civil dedicada a la investigación, enseñanza y difusión de la doctrina social de la Iglesia.

Autor: Carlos Ruiz González
Tomado del libro:
200 Emprendedores Mexicanos:
La construcción de una nación
Ludlow, Leonor (comp.)
México: LID, 2010
 
 
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