La filosofía de la acción de Carlos Llano presupone sus análisis metafísicos y epistemológicos en tanto que le permiten definir cómo es que el hombre es capaz de determinar el estado en que se encuentran las cosas, para luego determinar su orientación al actuar. 

El núcleo de sus trabajos es el acto de decisión. Ello le lleva a detenerse en varios puntos de su obra en consideraciones sobre la voluntad, en tanto facultad que decide, y a analizar la relación de esta con la inteligencia. La propuesta de Llano evita caer en el extremo intelectualista, y al mismo tiempo evita el voluntarista, en tanto que propone que la relación de la una sobre la otra no es unidireccional. Lo logra fincando el estudio de las facultades en el estudio mismo del agente, la persona que actúa, en relación a sus potencias de acción. En ese sentido, su filosofía de la acción supone necesariamente estudios antropológicos. Ello lo lleva a estudiar otros muchos aspectos de las personas, entre estos la libertad, la amistad, el bien humano, la formación del carácter, las virtudes, entre otros.'

Todo ello permea sus estudios particulares sobre el acto de dirección dentro de la empresa. Llano busca una definición de la dirección que se refiriera al modo de ser y de actuar de la persona que dirige. En su pensamiento las habilidades directivas se dan en términos de virtudes humanas aplicadas al contexto de la organización. Estudia el managment desde la noción de phronesis aristotélica en los tres pasos que define de éste: diagnóstico, ejecución y mando. A su vez, sus trabajos sobre la persona le permiten mostrar el lado humano del sistema empresarial. Para Llano no se debe separar la persona, en tanto sustancia, de sus operaciones y actividades. Ello le permite plantear una redefinición a la noción del welfare en la que se considera no sólo el capital, sino el trabajo, la persona que trabaja, y el desarrollo de la comunidad. 

El autor trata de recuperar la validez práctica de la filosofía aristotélica, haciendo énfasis en el estudio del formalismo de la idea ejemplar en el uso inadecuado de la analogía.

Las obras de Llano que principalmente tratan temas de antropología y de filosofía de la acción pueden catalogarse de esta manera:*

B. Obras de la razón en cuanto al conocimiento de sus operaciones, ya no especulativas, sino prácticas. 

  1. Examen filosófico del acto de la decisión: sobre la reflexión del entendimiento sobre sí mismo, así como sobre la voluntad para el conocimiento de los objetos y motores de la acción humana. 
  2. Las formas actuales de la libertad: estudia la libertad desde una perspectiva fenomenológica aristotélica.
  3.   Formación de la inteligencia, la voluntad y el carácter: sobre las facultades superiores del ser humano y su interrelación.
  4.   Fantasmas de la sociedad contemporánea: análisis de fenómenos éticos y sociales comunes contemporáneamente, analizados desde una perspectiva cristiana.
  5.  Nudos del humanismo en los albores del siglo XXI: sobre los ‘problemas’ ‘tensiones’, ‘aporías’ o ‘nudos’ a los que se enfrentan los estudios humanísticos contemporáneos, tales como la tolerancia, los derechos humanos y la muerte.
  6.  Dilemas éticos de la empresa contemporánea: sobre cuestiones éticas en el contexto de las organizaciones.
  7.  La amistad en la empresa: una aplicación a la organización de los libros VIII y IX de la Ética Nicomaquea de Aristóteles.
  8. La enseñanza de la dirección y el método del caso: que parecería un texto manualístico para profesores de un método determinado de enseñanza, pero es más bien un estudio sobre la phronesis o prudencia aristotélica.

*Tomado de Óscar Jiménez, Epítome de la filosofía de Carlos Llano.