Ocho de cada diez candidatos que concursan por una vacante empresarial dicen buscar “desarrollo profesional”. Sin embargo, pocos logran definir qué es ese “desarrollo” (Número identificado después de mi experiencia de 5 años de entrevistas de selección con base en valores). Las empresas invierten en programas de formación para sus empleados… pero, ¿se obtiene el desarrollo anhelado? ¿Es responsabilidad de la empresa? ¿Existe un límite? ¿Se puede confundir esa ayuda con una obligación (rescate) indefinido? En este artículo abordaremos este tema a través de la subsidiariedad.